Cuidar y proteger la piel de manera tópica a diario es fundamental para que tenga un aspecto sano y radiante, pero la dieta también influye en la salud y la belleza de la piel. Así, una dieta variada y que incluya alimentos ricos en nutrientes con propiedades antioxidantes será mucho mejor para la piel que una alimentación a base de productos ultraprocesados o con grasas saturadas.
Su alto contenido en ácidos grasos Omega 3 ayuda a fortalecer la barrera protectora natural de la piel, que es esencial para un cutis suave, liso y de aspecto más joven. Además, el aguacate es rico en antioxidantes, como las vitaminas C, A y E.
El tomate destaca por ser una excelente fuente de licopeno. Esta sustancia no solo le aporta al tomate su característico color rojo, sino que sus potentes propiedades antioxidantes ayudan a reducir el impacto de los radicales libres sobre las células cutáneas. Así, consumir tomate te ayudará a prevenir el fotoenvejecimiento.
El salmón es una de las mejores fuentes de vitamina D. Esta vitamina tiene propiedades antiinflamatorias y es necesaria para la correcta absorción de calcio —por lo que es fundamental para los dientes, huesos y músculos—, además, es rica en ácidos grasos Omega 3, que refuerzan la barrera protectora de la piel.
Aparte de tener una pulpa rica en vitamina C, la piel del kiwi está repleta de nutrientes con propiedades antioxidantes, como la vitamina E. Además, si consumes esta fruta con piel, obtendrás hasta un 50 % más de fibra por pieza, lo que te ayudará a saciar el apetito.
La nuez es rica en ácido fólico, una vitamina del grupo B esencial en el proceso de renovación celular. Además, las nueces también tienen un alto contenido en antioxidantes, como vitamina E, vitamina A, zinc y selenio, por lo que es un alimento excelente para combatir el estrés oxidativo. También es una de las mejores fuentes de proteína vegetal.
Además de ser ricas en betacaroteno, que ayuda a proteger la piel frente a la radiación solar, las espinacas están cargadas de vitamina A, vitamina C, vitamina E, vitamina K, vitaminas del grupo B y ácido fólico.
Los alimentos ricos en probióticos ayudan a regenerar la flora intestinal. Las alteraciones digestivas pueden hacer que la piel se inflame, sobre todo si se padecen problemas cutáneos como acné o rosácea. Eso sí, asegúrate de que sea yogur natural y sin azúcares añadidos.
La naranja, además de sabrosa, es rica en vitamina C, un antioxidante natural que ayuda a darle a la piel un aspecto radiante. Aunque muchos serums contienen vitamina C, desaconsejamos experimentar con mascarillas caseras hechas con cítricos, ya que pueden irritar o manchar la piel.
No hay nada mejor que un vaso de agua para acompañar todos estos alimentos o para saciar la sed, ya que hidrata todo el organismo, incluida la piel. Si te cuesta tomar varios vasos al día, intenta consumir alimentos con un alto contenido en agua, como la sandía en verano o los caldos en invierno.
Cuidarse y llevar una dieta rica en alimentos beneficiosos para la piel no tiene por qué ser complicado. Recuerda complementar tu rutina de belleza con tratamientos especiales para tu tipo de piel.