A los cuarenta, las líneas de expresión no desaparecen como lo hicieron a los treinta. Los niveles de estrógeno ocasionan que la piel se seque más. Y las arrugas en el cuello y el escote comienzan a notarse. En general, lo importante a esta edad es la humectación de la piel y el uso de ingredientes que fomenten la producción de colágeno.
Comienza con un limpiador facial sin espuma para remover células muertas ya que a esta edad los productos con retinol se utilizan a diario es conveniente deshacerse de la descamación de la piel.
Utiliza protector solar a diario para prevenir mayores daños. Los péptidos y retinoides son dos ingredientes que no pueden faltar en tu rutina. Ayudan a reconstruir el colágeno y mejoran la textura de la piel.
Por último, no puede faltar una crema hidratante con un alto nivel de glicerina o ácido hialurónico para ayudar a la piel a retener la humectación que necesita.
Recuerda combinar estos productos con tus tratamientos de Dermos favoritos para obtener los mejores resultados posibles.